En este post queremos que conozcáis la visita guiada a Burgos «Calles con Historia», un interesante recorrido por la calle Fernán González.

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Calle Fernán González, arteria principal del Burgos medieval y renacentista

Esta calle, que hoy en día está dedicada al “Buen conde”, durante  algunos siglos se llamó Calle Real o de las Armas.  Algunos de sus tramos se denominaron también Tenebregosa, Coronería y San Llorente.

Se puede decir que hasta el siglo XVII fue la arteria principal de la ciudad. En ella residía la nobleza, así como los acaudalados mercaderes burgaleses enriquecidos con el comercio de la lana. También en ella tenían sus negocios plateros, coqueros (vendedores de esta clase de carbón), chapineros (vendedores de chapines) y traperos (comerciantes de paños finos).

Esta calle contaba con varias iglesias. Aquí se encontraban las desaparecidas parroquias de San Martín, San Román, Nuestra Señora de Viejarrúa y San Llorente. La única iglesia que ha pervivido hasta nuestros días es la de San Nicolás.

La calle ha sido transitada durante siglos por un gran número de peregrinos en su camino hacia Santiago de Compostela. Solo en esta calle había siete hospitales donde se daba acogida y ayuda  a los caminantes jacobeos.

Durante la guerra de la Independencia las tropas napoleónicas causan enormes destrozos en Burgos, aunque en los años de ocupación también se realizan importantes obras de saneamiento y embellecimiento en la ciudad. Entre otras obras, los franceses ordenaron el derribo de varias casas de la Calle Tenebregosa con el fin de ensanchar la calzada.

También en este tiempo se lleva a cabo la supresión de todos los pequeños cementerios públicos desperdigados por la ciudad en iglesias y conventos.  El primer cementerio extramuros se realiza entonces en el entorno del Monasterio de San Agustín. Tras la marcha de las tropas napoleónicas, perdida la guerra en 1813, el Ayuntamiento se comienza a plantear la construcción de un camposanto municipal a imitación del que hicieron los franceses. El lugar elegido para su emplazamiento fueron las parcelas situadas en la Calle Real, entre el denominado Solar del Cid y el Arco Fernán González.

El Paseo de los Monumentos

En esta visita guiada a Burgos «Calles con historia» vamos a hacer un recorrido por el llamado «Paseo de los Monumentos».

Comenzamos nuestro recorrido en el Arco de San Martín, una de las doce puertas de la muralla medieval, por la que entraban en la ciudad los reyes tras haber realizado el juramento de defender los fueros de la misma. El arco debe su nombre a la desaparecida iglesia de San Martín, cuya ubicación estaba próxima a este lugar.

Unos pocos metros más adelante encontramos un monumento erigido en 1784, reinando Carlos III, en el denominado Solar del Cid. Según la tradición en este lugar tuvo su casa Rodrigo Díaz de Vivar.

Continuamos nuestro recorrido y llegamos al monumento levantado en memoria del guerrillero Juan Martín Díez, “El Empecinado”, nacido en Castrillo de Duero (Valladolid, 1775) . Este héroe de la Guerra de la Independencia fallece ejecutado, por orden de Fernando VII, en Roa el 19 de agosto de 1825. En 1856 sus restos se traen a Burgos y se depositan en este emplazamiento.

Poco después, siguiendo nuestro camino, un arco triunfal al modo romano llamará nuestra atención, es el arco construido en el siglo XVI como homenaje a Fernán González. En él encontramos una dedicatoria al “Buen conde” escrita por Fray Luis de León a petición del Ayuntamiento de Burgos.

Nos dirigimos hacía la Catedral y a la altura de la iglesia de San Nicolás tenemos una de las vistas más bellas de la seo burgalesa.

La iglesia de San Nicolás en su origen pertenecía al Cabildo de la Catedral quien en 1408 la cedió al vecindario. El templo actual se construye a  principios del siglo XV en el lugar donde existió un templo románico. Cuenta en su altar mayor con un espléndido retablo en piedra realizado por  Francisco de Colonia a principios del siglo XVI.

Siguiendo nuestra ruta llegamos al Palacio de Castilfalé, que se alza enfrente de la puerta de la Coronería de la Catedral de Burgos. Se construye en el siglo XVI en el solar donde se encontraba en la segunda mitad del siglo XV la casa de los Colonia, importante familia de escultores y arquitectos de esta época. La construcción del palacio la lleva a cabo el arquitecto Juan de Vallejo por encargo del mercader Nicolás de Gauna.  Los Condes de Castilfalé compran la propiedad en 1920 y llevan a cabo una transformación del palacio con un estilo postmodernista apreciable en la actualidad. En nuestros días es sede del archivo municipal.

Y finalizamos nuestro recorrido en la Casa de los Cubos, un palacio del Siglo XVI que perteneció a la familia de los Astudillo Salamanca y que debe su nombre a los cubos que flanquean las esquinas de la fachada. Actualmente es el emplazamiento del albergue municipal, donde la Asociación de Amigos del Camino de Santiago brinda un trato excepcional a todos los caminantes jacobeos.

¡Anímense a descubrir con nosotros muchas más historias de esta calle fascinante!